Rigoberto José Juárez era un niño de 14 años cuando su familia en Oaxaca lo vio por última vez. Al pasar del tiempo, terminaron por pensar que estaba muerto, hasta el 18 de mayo pasado, cuando a sus 32 años pudo reencontrarse con sus seres queridos.
Durante un año, Rigoberto fue apoyado por el DIF Cajeme, organismo que a través del programa de Atención a Personas en Situación de Calle le proporcionó atención médica, alimento, higiene personal, ropa limpia y un albergue temporal.
En coordinación con la Comisión de Búsqueda de Personas para el Estado de Sonora, las autoridades lograron encontrar a la familia del hombre, quienes no sabían nada de él desde hace 19 años.
De esta manera, las instituciones localizaron al hermano de Rigoberto, Isidro, quien acudió a Cajeme para reencontrarse con su hermano; posteriormente, ambos fueron trasladados de Sonora a Oaxaca, “para empezar una nueva vía fuera de las calles”.
Las instituciones sonorenses difundieron el caso de Rigoberto en sus redes sociales, como un ejemplo de las labores de la Comisión de Búsqueda y de lo que puede lograr el apoyo a las personas que viven en las calles.
“Rigoberto y su hermano Isidro agradecieron toda la ayuda recibida y las acciones de bienestar que promueve la presidenta del voluntariado de DIF Cajeme, Patricia Patiño”, señaló la instancia en un comunicado.
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