En medio de la protesta que protagonizan los trabajadores del ISSSTE de Tehuantepec, contra la asignación de 17 contratos que desplazarían a igual número de eventuales, crece la exigencia para que concluya la obra de ampliación de ese nosocomio.
La ampliación, considerada una necesidad para mejorar la atención médica de los derechohabientes, comenzó en 2023, sin embargo, a medio año de 2024, la obra quedó suspendida. Las autoridades del ISSSTE no informaron las causas.
Actualmente, las áreas donde se construirían los consultorios de unas nueve especialidades, como las de Pediatría, Otorrinolaringología, Ginecología, Traumatología y Medicina Interna, entre otras, están cubiertas por maleza y las pocas estructuras metálicas son carcomidas por el óxido.
Nosotros, dijeron los trabajadores, necesitamos la ampliación de nuestro hospital, porque en el que laboramos en la actualidad está quedando pequeño ante el crecimiento de los derechohabientes, se ha deteriorado y constantemente presenta fallas eléctricas.
El nosocomio actual, se construyó hace 35 años, y desde entonces nunca se conectó a una red de drenaje, trabaja con fosas que a cada rato se inunda y genera costos para su limpieza, al igual que produce gastos la alimentación de una planta de luz, casi todas las noches, por fallas eléctricas.
Aquí trabajamos 300 sindicalizados, 80 eventuales y unos 60 de confianza, y todos anhelamos que las autoridades del ISSSTE volteen hacia nosotros, porque este hospital atiende a derechohabientes del Istmo de Tehuantepec.
Demandamos, que el ISSSTE retome la ampliación del segundo nivel del nosocomio, que tanta falta hace porque lo poco que avanzaron, quedó en obra negra y está deteriorándose por el abandono desde mediados del año pasado, indicaron.
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